Fue un honor y un profundo aprendizaje participar como ponente en las jornadas Mujeres en Modo ON, organizadas por Inserta Empleo (Fundación ONCE), un espacio creado para mujeres con discapacidad víctimas de violencia de género. Un proyecto que no solo visibiliza realidades, sino que activa herramientas concretas para transformarlas.
La Comunicación como Herramienta de Poder
Mi intervención, “Comunicar con Éxito”, se centró en un principio clave: nuestras palabras pueden ser el puente o la barrera entre nosotras y nuestras metas. Hablamos de cómo:
La autenticidad rompe estereotipos (“no necesitas ser perfecta, sino clara y convincente”).
El lenguaje no verbal refuerza nuestra seguridad (postura, mirada, tono).
Las redes sociales y el entorno digital son aliados para construir una marca personal que abra puertas.
Pero, sobre todo, destacamos que comunicar bien no es un privilegio, sino un derecho y una habilidad que se entrena. Y en un mundo donde a menudo se silencia a las mujeres con discapacidad —y aún más si han sufrido violencia—, reclamar nuestra voz es un acto de resistencia.
El Coraje de las Asistentes: Ellas Son el Verdadero Aprendizaje
Más que una ponencia, este fue un diálogo con mujeres llenas de coraje, que compartieron sus miedos (“¿quién me escuchará?”), pero también sus sueños (“quiero montar mi negocio”, “necesito que mi CV refleje mi valor”). Fue una masterclass de resiliencia: recordé que detrás de cada historia había una lucha, pero también una fuerza imparable.
Agradezco a Inserta Empleo y a Fundación ONCE por incluir la comunicación como eje estratégico en la inserción laboral. Porque cuando una mujer encuentra las palabras para definir su talento, el mundo no puede ignorarla.
